martes, 31 de agosto de 2021

Mmm... ¡Lo quiero!

 


"Desde hace algunos años Oriente ha sido particularmente propenso a crear ídolos mediáticos irreales: hologramas, personajes de animé, estrellas pop, avatares en 3D. Ahora la revolución digital ha dado un paso más y está tentando a los clientes con sus ídolos de IA impecables: influyentes virtuales que no aumentan de peso, nunca envejecen y mantienen sus narices generadas por computadora fuera de la controversia. Atractivos personajes virtuales que compiten con reales, en una combinación de las idiosincrasias, sex appeal cultural y  moda globales. Japón, China y California están en la vanguardia y empiezan a obtener importantes contratos de publicidad y a amasar cientos de miles de seguidores en Tik Tok, Twitter, Instagram, Snapchat y otras redes sociales. La esperada venganza de la nueva ruta de la seda no ha hecho más que comenzar…"


jueves, 12 de agosto de 2021

Mirada culpable

 


"La dirección que lleva el mundo actualmente, priorizando el sibilino acoso de la ciber-tecno ciencia en detrimento de las humanidades. ¿Qué sentido que tienen los mitos en la vida actual? La modernidad es en gran medida la ilusión de conocimiento, de superación. Una serie de historias o fabulae que, en tiempo de Homero, tenían un carácter diverso y (a buen entendedor) siempre conducían a una suerte de conocimiento esencial. Hoy el mito es ciertamente inasible.
¿Por qué aún nos resulta temible? Quizá porque es el mundo el que asusta. Intentamos tratar el mundo como una cosa doméstica, pero sólo porque estamos aterrorizados. Y tenemos razón de estarlo. La naturaleza, por su propia constitución, es algo enigmático, cruel y difícilmente dominable. Estas historias son el tejido mismo del “holobios”, comunicando y reflejando sin ambigüedad nuestros propios tabúes íntimos y civilizatorios."


jueves, 5 de agosto de 2021

Cruel providencia

 


"Los rituales son procesos repetitivos, que suelen realizarse bajo una inefable ensoñación, un estado mental alterado que puede acompañarse de distorsión del tiempo y amnesia, como en los estados hipnóticos. Durante unos instantes se suspenden las tensiones del día y se desconecta. Se crea un espacio en el que pueden ocurrir cosas extraordinarias,  al menos durante un tiempo sin tiempo. Es posible decir con tranquilidad cosas que, en otros contextos, podrían resultar embarazosas. Se pueden establecer conexiones que no se darían en el día a día. Así, en un abrir y cerrar de ojos, tiene lugar una poderosa y ¿por qué no decirlo? divina introspección, codiciosamente buscada desde el origen…"

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