"Generando atávico misterio, la bruma crea un ambiente de
incertidumbre, ya que los personajes y el lector no pueden ver claramente lo
que está sucediendo a su alrededor: cualquier amenaza podría estar oculta en la
densa niebla. Crea una oportuna atmósfera opresiva y claustrofóbica, haciendo
que los personajes se sientan atrapados y vulnerables ante el peligro inminente.
Su densidad puede desorientar a los personajes, llevándolos a perderse o
separarse de su grupo, intensificando la emoción y manteniendo al lector en
vilo enfrentar situaciones desconocidas y potencialmente aterradoras,
sorprendentes o inesperadas. ¿Que se encuentra en su interior, simbolizando los
miedos y conflictos internos de los personajes, en este escenario ideal para
emboscada, traiciones y trampas? Esto añade un elemento de suspense táctico a
la trama, manteniendo la tensión durante toda la historia hasta el próximo e insospechado
giro de guion…"
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