"La capacidad orgánica de mantener su equilibrio, técnicamente
denominada como homeostasis (del griego ὅμοιος
similar, y στάσις, estabilidad) permite mantener una condición interna estable compensando
los cambios en su entorno mediante el intercambio regulado de materia y energía
con el exterior (metabolismo). Un balance dinámico obtenido merced a una red de
sistemas de control realimentados que constituyen los mecanismos de autorregulación de
la vitalidad.
En cibernética, un homeostato permite a los sistemas autorregulados para
mantener ciertas variables en un estado estacionario, de equilibrio dinámico o
dentro de ciertos límites, cambiando parámetros esenciales de su estructura
interna. Imaginemos por un momento. ¿Qué sucedería si las máquinas pudieran aprender
hacer esto mismo de manera inteligente y autónoma?"
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