“En el brutal juego de la dominación mundial
no existe la posibilidad de alianzas
definitivas,
no hay reglas ni normas de comportamiento
válidas.
Sólo cabe disponer de métodos más
inteligentes,
más sofisticados y eficaces, para subvertir,
sabotear y destruir totalmente al enemigo,
antes de que él haga con nosotros lo mismo.”
(James
Doolittle, general U.S. Army)
“Hemos reaccionado demasiado tarde.
Ladrillo a ladrillo (BRICS) han levantado
un impenetrable muro económico (WALL)
que acabará de una vez por todas con la Ley
Monroe.
Y esta vez no habrá barbitúricos que podamos
colar.
(Jim O’Neil,
Goldman Sachs)
Quiere la moderna estrategia
militar dominar todos los terrenos posibles. Así, al tradicional tierra, mar, aire y
subsuelo, se suman ahora los tejidos neuronal y virtual (noosfera internaútica)
de los dominados. Espartaco demostró a los sorprendidos estrategos de todas las
eras pasadas y venideras, que no bastaba con encadenar el cuerpo para hacer lo
mismo con la mente. Así nació la más potente arma que legaron los alemanes a la
entera humanidad, superior en eficacia incluso al uranio enriquecido y los sincronizados detonadores de
infrarrojos: la propaganda.
Al TICS & BRICS del hegemónico
G11 que en 2050 se disputará el 60% del PIB del planeta y, por ende, también la
legitimidad de su soberanía, a día de hoy le toca preocuparse y planificar el modo
más eficaz, que no siempre resulta –ni de lejos- el más barato posible, de restringir
la libertad de movimiento, que no es sino la de pensamiento, y dejar así inoperante
la capacidad de defensa de su adversario: Turquía,
Indonesia y Corea del Sur de un
lado. Brasil, Rusia, India, China
y Sudáfrica del otro. Y entre medias
de ambos bloques, allá en su frente, &rán.
Atento a la jugada, Pedro “el romano” está impaciente. Por
sus cuentas, lleva ya demasiado tiempo a la espera de ocupar el trono de su
antecesor tocayo, y ser la piedra cúbica que goce de los honores de servir de
broche al edificio que habrá de ser derrumbado.
Las fauces se aprestan a ejecutar
eficaces la sagrada función para la que fueron diseñadas. El rojo vivo, que
palpita más en las arterias que en las retinas, pronto ofrecerá el aspecto
renegrido de la sangre reseca. Cibelina, como la tierra de Kemi ya sin Hussein Mu-Barack, generosa
y fértil como la Nada primordial. Tambores de guerra, jinetes eficaces e incansables,
siete trompetas asediando los agrietados muros de la Ciudad Lavada y New Jericó,
la lava se desborda corrosiva en una danza de silenciosa parsimonia en los
hornos high-tech de Kali, preludio
certero de más apaciguadores “sables”.
Al áureo George Gänswein, ni su origen alemán, ni los 1.80 de su ario porte
en oro y azur, le librarán de tener que pagar los platos rotos del Apartamento,
conforme a los designios de un ajedrezado sobrehumano. Satán mueve. Cada
aparente error, una jugada maestra hacia la “muerte del Jeque”. Buenas noches,
Su Santidad…
Si John Dee levantara la cabeza, no le sorprendería ver el rostro sonriente
del incontenible y paciente dragón confuciano. Una veraz sabiduría ancestral, única
en su género, capaz de pastorear a lobos. Su selección pronto jugará un
amistoso con la de Tarsis. Será un
partido inolvidable. Los cuervos sobrevuelan sobre Babilonia la Grande, y no están de paso. Esta vez vienen, mi querido
Mister Monroe, vienen definitivamente a
quedarse. ¿Iris? ¡Non sine nascente solis!
Añado "el rapto" al "musgo". No puedo por menos.
ResponderEliminarTriple abrazo :)